Ché… Araña
Francisco Gabilondo Soler
(Tango, 1942)
Al fondo del barril desvencijado
que alumbra un rayo de sol,
la araña en sus hilos baila tango
con los acordes del bandoneón.
Don Gato imita el instrumento
estirando un farolito de papel,
y su cola menea con sentimiento
llevando el ritmo del baile aquel.
“Che… Araña,
baila con maña,
hay que contar:
tres… pasitos,
arrastraditos
pa´delante y para atrás”.
Entre las astillas carcomidas
que quedan del viejo tonel,
se asoma petulante la clientela
y de puntillas penetra en él.
Brillantes cucarachas aburridas,
pulgones fatigados de picar,
más otras sabandijas relamidas
que se reúnen a trasnochar.
“Che… Araña,
baila con maña,
hay que contar:
tres… pasitos,
arrastraditos
pa´delante y para atrás”.
“Che… Araña,
baila con maña,
hay que contar:
tres… pasitos,
arrastraditos
pa´delante y para atrás”.